Cada 365 días el año cambia y los propósitos personales son cada vez más y mejores, pues en cada bienvenida del calendario recordamos que la vida se edifica con sueños, con anhelos, con aprendizajes que solo se harán realidad en la medida en que luchemos por ellos…
Sin embargo, el cambiar de año no significa crecimiento, un año más es tan solo una nueva oportunidad para sacar lo mejor de sí mismos y entregárselo a los demás, son nuevos amaneceres, nuevas sonrisas, nuevas metas que no dependen de ningún día de la semana, sino que deben estar a cargo de nosotros mismos, somos nosotros quienes debemos cambiar para progresar, entender que si el año anterior nos dejó vacíos es porque nos hace falta un poco más de esfuerzo para poder alcanzar nuestros objetivos.
Iniciar este 2017 con lentejas en los bolsillos o con la ropa interior amarilla no garantiza prosperidad, amor ni mucho menos dinero, lo único que garantiza esto es la actitud con la que veamos la vida a partir de hoy domingo 1 de enero… No hay excusas para que este año nuevo no sea de gran provecho para todos; viajar no es cuestión de recorrer la manzana con la maleta, o de pedirlo como deseo mientras te comes las uvas, viajar es tu decisión, eres tú quien hace tus sueños realidad, eres tú quien decide si vivir vale realmente la pena.
«Hoy empieza un nuevo libro, con 365 páginas para llenar», pues bueno, que este libro escrito por ti misma esté lleno de sonrisas, sueños, metas por alcanzar y sobretodo por buenos valores, llena tu vida de sinceridad, abraza más, ama con fuerza y no olvides en esta primera página encomendarte a Dios para que sea tu guía el resto del camino; la unión familiar, el respeto y entender que todo es una oportunidad te llevará muy lejos.
¡Feliz y Próspero Año 2017!
