¿Por qué tengo que estudiar?

«Son las 5:00 a.m. y suena a toda marcha mi despertador, de un brinco quedo sentada en la cama y casi lela por el sueño trato de levantarme sin conseguir hacerlo… Vuelvo a recostarme por cinco minutos más, entonces retomo mis sueños y en menos de nada siento un poco más de luz en mi cara, así que abro los ojos. ¡Oh Dios, se me hizo tarde!

Voy corriendo a la ducha, y mientras el agua me empapa por completo el cuerpo, pienso en que voy a llegar tarde, y todo por culpa de haber trasnochado realizando mis trabajos la noche anterior, imagino que la vida sería menos dura si yo no tuviera que ir a la escuela, pues tendría tiempo de sobra para dormir… Entonces me pregunto: ¿Por qué tengo que estudiar?»

Bueno querida amiga, realmente NO TIENES que estudiar. Ir a la escuela no debería ser un sacrificio, por el contrario, debería ser agradable, no solo por el hecho de aprender cada día algo nuevo, sino también por conocer, entablar nuevas amistades, entre otros beneficios de estudiar, sin contar que el hecho de que tengas estudio te da un poco más de valor, pues no eres el dinero que cargas en los bolsillos, pero si eres el conocimiento que posees en tu cerebrito.

Es por eso chicas que deben estudiar, por algo nuestras mamás dicen que esto es lo único que nos queda, disfruten al máximo la etapa de la escuela, la prepa y la Universidad, aprendan lo que más puedan, lean, indaguen, empápesen de conocimiento, no solo para sobresalir en sus clases, sino en general en su vida.

Una mujer que estudia, que es inteligente, soñadora y dedicada, fácilmente logra todo lo que se propone, pues este es apenas el primer peldaño del éxito, que si ha de subirse con esfuerzo y mucha dedicación, nos llevará a la cima de las metas propuestas. Una mujer preparada consigue un buen empleo, gana grandes sumas de dinero, suficientes como para complacerse comprando ropa, zapatos, un buen auto y a largo plazo su propio apartamento.

Así que chicas, no quieran nunca dejar de estudiar por correr detrás de una ilusión amorosa, un trabajo esclavizante o simplemente por pereza, pues pueda que por el momento encuentren la dicha, pero seguramente más adelante encontrarán reproches por parte de la persona que tengan al lado; los tiempos han cambiado y el hombre no es precisamente quien debe cargar con los gastos del hogar, ahora todo es compartido, y que mejor que no solo sea compartir gastos, sino también compartir experiencias, aventuras, conocimientos, pues realmente lo que aprendas en la vida será lo que te lleve a ser una gran persona.