No se puede decir que algún día dejara de doler la partida de un ser amado, pero lo realmente importante es aprender a convivir con la idea, y seguir adelante. Con seguridad todos tienen a alguien que ha perdido a una persona cercana, como la mamá, el papá, el esposo, un hijo, etc.
Vivir la etapa del duelo definitivamente es algo que no se puede ni se debe aplazar, es un proceso necesario que nos ayudara a aceptar y a liberarnos del sufrimiento. Todo depende del enfoque con que miremos las cosas, definitivamente esto marca todo aspecto de nuestra vida.
Sí se puede aprender a vivir con la idea, es un proceso enmarcado por nuestras ganas de vivir, por seguir adelante, por demostrarse así mismo la fortaleza que existe en el interior, por hacer una especie de tributo a ese ser querido que ya no esta y que seguramente estará muy complacido de verte realizado y feliz.
Pensar que no esta bien vivir triste, que no es saludable como dice por ahí «estar muerto en vida», uso esta expresión porque el dolor puede ser tan grande que se llega a sentir esto y muchos toman la decisión de vivir así, es muy triste ver estas historias de vida.
Es normal sentir que las cosas perdieron sentido, que ya no hay motivos para seguir, en esta etapa por citarla de alguna manera se puede pasar un año o un poco mas, pero no se puede pretender vivir de por vida así, el punto es encontrar motivos para seguir adelante, como: el estudio, los hijos, los hermanos, el reto de mostrarse a si mismo que puede lograr sus sueños.
No se debe dejar apagar la luz interior esa que nos hace levantarnos cada día y luchar contra las adversidades, después de todo si aun seguimos con vida es para algún fin, luchar por ello nos da sentido a nuestro existir, la vida es solo una y tiene su ciclo, todos nacemos, crecemos y morimos es una realidad que no se puede cambiar. Lo importante es hacer de nuestra vida algo valioso, algo para recordar en la memoria de quienes pasa y nos rodean en el transcurso de nuestra vida.
